Ciudad histórica fortificada de Campeche
Artículo publicado por Emi Mendoza en la Revista El Pollo Urbano (elpollourbano.es), revista No. 188 del mes de Abril de 2019.
Estimados lectores, nuestra queridísima amiga Norma Armida (a quien le mandamos un saludo afectuoso desde aquí), nos invitó a pasar unos días en su residencia de la ciudad de Campeche, en el sureste mexicano y nos llevó a conocer algunos de los más representativos monumentos históricos de su ciudad que en esta ocasión queremos compartir con ustedes.
Como les decía, aprovechando de unos días de asueto, fuimos a visitar a nuestra amiga que vive en la ciudad de Campeche, capital del Estado del mismo nombre, que se ubica en la costa del Golfo de México. Además de haber conocido a su encantadora familia y haber disfrutado de especialidades gastronómicas locales, Norma Armida nos llevó a conocer su hermosa ciudad.
San Francisco de Campeche
La ciudad fue fundada en 1540 por los conquistadores españoles en el lugar de la preexistente ciudad maya de Can Pech. Los conquistadores le dieron el nombre de Villa de San Francisco de Campeche en honor de su fundador Francisco de Montejo ‘El Mozo’. Es una de las pocas ciudades fortificadas del continente americano y que todavía conservan gran parte de su muralla colonial y fortificaciones que la protegían de piratas y bucaneros.
La ciudad fue fundada en 1540 por los conquistadores españoles en el lugar de la preexistente ciudad maya de Can Pech. Los conquistadores le dieron el nombre de Villa de San Francisco de Campeche en honor de su fundador Francisco de Montejo ‘El Mozo’. Es una de las pocas ciudades fortificadas del continente americano y que todavía conservan gran parte de su muralla colonial y fortificaciones que la protegían de piratas y bucaneros.
El Malecón
Una de las atracciones más bonitas es, sin duda, el malecón que recorre la costa del centro histórico de Campeche, ideal para pasear, ya sea en bicicleta o simplemente caminando tomaditos de la mano de nuestra pareja. Recorrimos gran parte de sus casi 7 kilómetros de largo disfrutando de una agradable brisa refrescante. El malecón aloja una serie de monumentos que representan eventos de la historia de la ciudad o que homenajean personajes nativos importantes, entre los que destaca la estatua de Justo Sierra Méndez, importante escritory político campechano, fundador de la Universidad Nacional de México en 1910. En nuestra caminata nos encontramos más adelante una enorme bandera de México que ondeaba señorialmente al compás de las rachas de viento marítimo. Sobre este hermoso bulevar encontramos las letras gigantes con la escrita CAMPECHE, donde posamos para varias fotos. Cada letra está coloreada y tiene dibujos alusivos a emblemas de la ciudad. A unos pasos de ahí se encuentra el parque Moch Couoh, al cual desgraciadamente no tuvimos acceso por estar en remodelación. Continuando con nuestro campante paseo encontramos la escultura monumental del héroe campechano Pedro Sainz de Baranda, quien tuvo una participación activa en la Guerra de Independencia. Después de pasar frente al Centro de Convenciones Campeche XXI, se puede apreciar la estatua de una niña que observa atentamente el horizonte donde se junta el mar con el cielo. Se trata de la “Novia del Mar” que representa una conmovedora leyenda local, en la cual una niña campechana se enamoró de un pirata extranjero y muere de tristeza esperando su regreso. Finalmente terminamos en el extremo norte del malecón donde entramos al parador gastronómico que alberga un grupo de restaurantes donde pudimos disfrutar de platillos típicos campechanos.
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La plaza principal y la Catedral de Campeche
La plaza principal señala el lugar donde inició el asentamiento de la población española luego de la conquista. Durante la época colonial se le conoció como Plaza Mayor, pero en 1826 se le confirió el nombre de Plaza de la Independencia como una manera de evocar la guerra independista concluida pocos años antes.
A pesar de haber sufrido varios cambios a través de su historia, la plaza principal recuperó el diseño de principios de siglo XIX caracterizado por un quiosco en el centro y un enrejado, delineación que mantiene hasta nuestros días. A un costado de la plaza principal sobresale la Catedral de Campeche dedicada a Nuestra Señora de la Purísima Concepción. Se trata de un edificio de estilo barroco con características neoclásicas, famoso por albergar en su interior estatuillas de arte sacro, destacando una pieza llamada "El Santo Entierro". Esta pieza es la representación de Jesucristo en un ataúd y durante la celebración del Viernes Santo es llevada en procesión por las calles principales de la ciudad.
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Fortificaciones de la ciudad
Debido a los constantes ataques de piratas ingleses y holandeses en el siglo XVII y XVIII, el gobierno de entonces comenzó a fortificar la ciudad de Campeche para defenderse de ellos. Se construyó una muralla formando un hexágono irregular alrededor de la parte principal de la ciudad, con ocho baluartes defensivos en las esquinas y sólo cuatro puertas. La entrada principal era la ‘Puerta de Mar’, la cual proporcionaba acceso a la ciudad desde el mar. Esta puerta abría hacia un muelle donde llegaban las pequeñas embarcaciones con mercancías desde barcos anclados más lejos. Las aguas cercanas eran pocos profundas y con el tiempo fueron rescatadas para convertirlas en tierra firme. Eso explica porque ahora la ‘Puerta de Mar’ está muy alejada de la costa. La puerta fue destruida a fines del siglo XIX y fue reconstruida en 1957. Al otro lado de la ciudad amurallada se encuentra otro de los accesos importantes de la época, la ‘Puerta de Tierra’ que era utilizada como ingreso principal para los suburbios. Actualmente esta puerta es un lugar de atracción donde se realizan espectáculos de luz y sonido. Los otros dos accesos de aquella época fueron la Puerta Guadalupe y la Puerta San Román que permitían el paso a otros barrios exteriores, pero fueron clausuradas.
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Los baluartes se han tratado de mantener en buen estado hasta nuestros días, aunque ahora cumplen otras funciones. Algunos fueron reconstruidos como el baluarte de Santiago que hoy es utilizado como jardín botánico. El baluarte más grande es el de ‘Nuestra Señora de la Soledad’ que protegía la Puerta de Mar. Actualmente alberga el museo de Historia de la Ciudad. Otro de los baluartes importantes es el de San Carlos que también protegía la Puerta de Mar. Se le puso este nombre en honor al Rey Carlos II. En la parte trasera de la ciudad está el baluarte de San Francisco que protegía a la Puerta de Tierra. Los otros baluartes son el de San Juan, que también protegía la Puerta de Tierra, el de San Pedro y el de Santa Rosa.
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Campeche de noche
Pasear por la ciudad amurallada en la noche es un verdadero placer. Algunas calles se cierran al paso de automóviles en donde se ponen mesas y sillas para ofrecer servicio de bar. En la plaza principal y en otros puntos de la ciudad se ofrecen espectáculos de luz y sonido proyectando imágenes 3D en los edificios públicos. Familias enteras mezcladas entre turistas pasean por todo el centro histórico disfrutando de la magnifica temperatura de que se goza al atardecer.
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Disfrutamos de unos días muy bonitos en esa espléndida ciudad… Debo decir que la pasamos muy ‘campechanos’, adjetivo que a menudo utilizamos para definir a alguien que disfruta de una vida tranquila y placentera como la que se vive en Campeche…
La del Estribo
Para concluir, me permití hacer una síntesis de la vida forajida que se vivía en las costas del Golfo de México y el Caribe durante los siglos XVII y XVIII, en la que incluí el terrible ‘saqueo de Myngs’ que sufrió la ciudad de Campeche en el lejano 1663.
Los famosos piratas como Myngs, Morgan, Blauvelty otros temibles bucaneros que trabajaban saqueando barcos mercantes y ciudades españoles transcurrían meses de descanso en la legendaria ciudad de Port Royal, en Jamaica, donde gastaban todo el dinero robado en prostitutas y alcohol. Esa inyección de vigor a la economía jamaicana tenía el beneplácito del gobernador de la isla, Thomas Modyford, y del imperio británico, usufructuario de la misma. Durante gran parte del siglo XVII, Port Royal fue la ciudad más rica y cruel del Caribe. El sistema de fortificaciones de Campeche formaba parte de un sistema defensivo general establecido por los españoles para proteger los puertos en el Golfo de México y el Mar Caribe contra esos ataques piratas. Sin embargo, Campeche contaba con tres rudimentarias fortificaciones aisladas una de otra. La ciudad cedió en 1663 al histórico saqueo comandado por el Almirante Myngs. Myngs era un famoso pirata con mucha experiencia sobre saqueos en todo el Caribe. El año anterior había atacado a Santiago de Cuba saqueando la ciudad a pesar de sus fuertes defensas. En 1663, muchos de los ladrones que recorrían los mares del Caribe para robar se unieron a él para la siguiente expedición de saqueo. En esta ocasión tocaba a la ciudad de Campeche, cuyas primeras fortificacionesno tuvieron la eficacia que se esperaba de ellas. A la flota de Myngs, principalmente inglesa, se unieron posteriormente cuatro barcos franceses y tres barcos corsarios holandeses, cuyos capitanes piratas habían ofrecido sus servicios de forma voluntaria. Myngs dirigió a la mayor flota de piratas aleados más grande jamás vista que constaba de catorce barcos bucaneros y más de 1400 piratas a bordo, entre ellos los temibles corsarios Henry Morgan y Abraham Blauvelt. La flota llegó a la bahía de Campeche por la noche y atacaron en la mañana temprano. La batalla duró pocas horas y hubo muertos de los dos bandos. Myngs resultó herido, pero al final los españoles se rindieron ante al ataque feroz y los piratas invadieron y saquearon la ciudad durante las siguientes dos semanas. Además de los 150,000 ‘Reales de a 8’ (monedas conocidas en el mundo anglosajón como ‘dólar español’) que se llevaron, en su botín también incluyeron embarcaciones del puerto local cuando se fueron. El saqueo a la ciudad de Campeche fue tan violenta y cruel que provocó gran indignación en el rey Carlos II. El gobernador de Jamaica, Modyford, se vio obligado a prohibir nuevas redadas similares en el Caribe. Sin embargo, cuando Modyford murió en 1679, los ataques piratas volvieron a aterrorizar los puertos. De los grandes saqueos que siguieron destacan el ataque a Veracruz en 1683 y la redada en Cartagena ese mismo año. Fue entonces que Campeche empezó a construir un mejor sistema defensivo, construcciones que podemos apreciar hasta la fecha.