Breve biografía del autor
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Mmh... ¿Dónde nos habíamos quedado? Ah sí! Les quería comentar algo sobre mí.
Mi nombre es Emi Mendoza y soy el autor de este espacio cultural. Infancia Nací en Iztacalco bajo el signo zodiacal de Géminis hace ya varias décadas. Crecí desarrollando grandes habilidades futbolísticas, driblando automóviles y peatones en las "Calles" de Plutarco Elías aprovechando el tránsito congestionado de las horas pico de la gran metrópoli iztacalquense. A muy corta edad fui obligado por mi padre a inscribirme a la escuela primaria "Heroicos", donde, obtuve el título de estudios primarios obligatorios con el máximo de los votos, presentando la tesis intitulada "Describe a tu familia". |
Años mozos
A la edad de 15 años, cuando se supone que un muchacho de esa edad debe jugar fútbol y divertirse con sus amigos, me dediqué a hostigar a mi primera novia, la rosita, quien con mucho amor y paciencia me ayudó a madurar y a abandonar definitivamente el sendero de los despropósitos.
Logré fatigosamente el certificado en la secundaria 164 con un modesto promedio que me llevó a tener la equivocada idea de poder continuar en la preparatoria. Al darme cuenta del camino escabroso que representaban los estudios, decidí renunciar durante mi primer día de bachillerato. Sin embargo, retiré repentinamente mi abdicación cuando vi la enorme cantidad de material genético femenino que circundaba mi pupitre durante las clases, descubrimiento que me dio el aplomo necesario para resistir a esa contingencia académica.
Inclinación por la lectura
Fue hasta mis años universitarios que descubrí mi afición por la lectura. Las obras que con seguridad cambiaron mi vida fueron la Odisea de Homero y la Divina Comedia de Dante. No leerlas fue fundamental para mi formación como ideólogo. Si hoy soy lo que soy, seguramente lo debo a la penuria que me provocó la falta de esas lecturas. Para defenderme del mundo tosco que me tocaba enfrentar en esas raquíticas condiciones culturales, desarrollé ciertas habilidades de sobrevivencia que me llevaron a convertirme en un sofista logrando confundir a todos los profesores y consiguiendo así, enigmáticamente, los títulos académicos de grado y postgrado con menciones horroríficas, perdón, honoríficas.
Nace un escritor
Un estudio personalizado realizado por mi astróloga de confianza me diagnosticó que me convertiría en un exitoso escritor de renombre gracias a haber nacido bajo la influencia de Géminis. La idea que yo tenía de convertirme en un gran novelista, se reafirmó después del resultado de ese análisis zodiacal y me mantuve firme en mi propósito a pesar de las carencias literarias que yo presentaba. Mi primera obra literaria, "Cuántos Cuentos Cuentas", logró vender una sola copia, y eso fue gracias a la insistencia de mi madre por comprarla, mi única admiradora.
Nace la idea de crear este sitio web
Mi tenacidad me hizo seguir adelante con empeño, y sin desistir en la obtención de mi objetivo, continué a representar mis ideas mediante letras o utilizando otros signos gráficos no convencionales dondequiera que yo iba. Desgraciadamente, el personal de limpieza siempre cancelaba mis composiciones literarias perpetradas sobre las paredes de esos baños públicos. Desilusionado y cansado de que con frecuencia me privaran del derecho constitucional que todo ciudadano tiene de expresar sus ideas con libertad, decidí crear este espacio virtual para continuar con los relatos de mis memorias sin ser acusado de vandalismo.
A la edad de 15 años, cuando se supone que un muchacho de esa edad debe jugar fútbol y divertirse con sus amigos, me dediqué a hostigar a mi primera novia, la rosita, quien con mucho amor y paciencia me ayudó a madurar y a abandonar definitivamente el sendero de los despropósitos.
Logré fatigosamente el certificado en la secundaria 164 con un modesto promedio que me llevó a tener la equivocada idea de poder continuar en la preparatoria. Al darme cuenta del camino escabroso que representaban los estudios, decidí renunciar durante mi primer día de bachillerato. Sin embargo, retiré repentinamente mi abdicación cuando vi la enorme cantidad de material genético femenino que circundaba mi pupitre durante las clases, descubrimiento que me dio el aplomo necesario para resistir a esa contingencia académica.
Inclinación por la lectura
Fue hasta mis años universitarios que descubrí mi afición por la lectura. Las obras que con seguridad cambiaron mi vida fueron la Odisea de Homero y la Divina Comedia de Dante. No leerlas fue fundamental para mi formación como ideólogo. Si hoy soy lo que soy, seguramente lo debo a la penuria que me provocó la falta de esas lecturas. Para defenderme del mundo tosco que me tocaba enfrentar en esas raquíticas condiciones culturales, desarrollé ciertas habilidades de sobrevivencia que me llevaron a convertirme en un sofista logrando confundir a todos los profesores y consiguiendo así, enigmáticamente, los títulos académicos de grado y postgrado con menciones horroríficas, perdón, honoríficas.
Nace un escritor
Un estudio personalizado realizado por mi astróloga de confianza me diagnosticó que me convertiría en un exitoso escritor de renombre gracias a haber nacido bajo la influencia de Géminis. La idea que yo tenía de convertirme en un gran novelista, se reafirmó después del resultado de ese análisis zodiacal y me mantuve firme en mi propósito a pesar de las carencias literarias que yo presentaba. Mi primera obra literaria, "Cuántos Cuentos Cuentas", logró vender una sola copia, y eso fue gracias a la insistencia de mi madre por comprarla, mi única admiradora.
Nace la idea de crear este sitio web
Mi tenacidad me hizo seguir adelante con empeño, y sin desistir en la obtención de mi objetivo, continué a representar mis ideas mediante letras o utilizando otros signos gráficos no convencionales dondequiera que yo iba. Desgraciadamente, el personal de limpieza siempre cancelaba mis composiciones literarias perpetradas sobre las paredes de esos baños públicos. Desilusionado y cansado de que con frecuencia me privaran del derecho constitucional que todo ciudadano tiene de expresar sus ideas con libertad, decidí crear este espacio virtual para continuar con los relatos de mis memorias sin ser acusado de vandalismo.