Ódiame
Canta Paulina Tamayo (y otras versiones)
Por Emi Mendoza
Estimados lectores, para nuestra sección “poemas musicales” les quiero proponer una canción peruana muy famosa en todo el mundo que se llama Ódiame. Además de escucharla en otras versiones, los invito a escucharla con la magnífica interpretación de la ecuatoriana Paulina Tamayo.
Reconociendo mi ignorancia musical
La idea de presentarles la canción Ódiame en la voz de Paulina Tamayo, habiendo tantos otros intérpretes, se debe a que descubrí hace poco a esta extraordinaria cantante ecuatoriana y la descubrí cantando precisamente esta canción considerada una de las más bonitas canciones peruanas de todos los tiempos. En un intento por compensar mi ignorancia musical al no haberla conocido antes decidí investigar más sobre ella y proponerles esta joya musical. |
La descubrí en el Rancho de Sánchez
Escuchando el Rancho de Sánchez, un “programa radiofónico online” español de publicación mensual dedicado a la Canción Ranchera y en general a la música hispanoamericana, me enteré que se lanzaba el desafío de identificar a una cantante de una grabación sin nombre que cantaba Ódiame de Rafael Otero López. Me fascinó la voz, pero no supe identificarla.
Escuchando el Rancho de Sánchez, un “programa radiofónico online” español de publicación mensual dedicado a la Canción Ranchera y en general a la música hispanoamericana, me enteré que se lanzaba el desafío de identificar a una cantante de una grabación sin nombre que cantaba Ódiame de Rafael Otero López. Me fascinó la voz, pero no supe identificarla.
Aparte su voz y grandes arreglos orquestales, la grabación no tenía ningún otro indicio para descubrir a la intérprete. Alguien logró identificar el nombre de esa dama en la voz de Paulina Tamayo y fue develado en el Rancho de Sánchez unos programas más tarde. De inmediato inicié mi investigación sobre esta grandiosa artista y al descubrirla empecé a disfrutar también otras delicias de su repertorio.
Los programas del Rancho de Sánchez con este argumento pueden ser escuchados en la radioteca de la revista online El Pollo Urbano (programa 36/17 y programa 40/18): http://www.elpollourbano.es/radio/2018/12/el-rancho-de-sanchez/ |
Paulina Tamayo
Paulina de las Mercedes Tamayo Cevallos (1965) es una cantante ecuatoriana mejor conocida como Paulina Tamayo. Se ha ganado el sobrenombre de “La Grande de Ecuador” por su destacada participación en la difusión de la música nacional de su país. Nació y se crio en una familia de mucho talento y alta sensibilidad musical. Su carrera artística empezó cuando tenía apenas 5 años ganando su primer reconocimiento. A los 9 años debutó en Lima, Perú, alternando con Chabuca Granda, otra grande de la música internacional quien quedó emocionada ante la voz de la pequeña intérprete.
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Embajadora del folclore ecuatoriano y latinoamericano
Más tarde, Paulina Tamayo empezó a realizar giras artísticas nacionales e internacionales cosechando aplausos en todas sus presentaciones. Ha compartido escenarios con los más importantes artistas de fama internacional como Alci Acosta, Roberto Carlos, El Greco, Los Panchos, Lola Flores, Los Visconti, Rocío Durcal, entre muchos otros. Se convirtió en la embajadora del folclore ecuatoriano y latinoamericano visitando varios países de América latina, Estados Unidos y recientemente de Europa. Ha interpretado temas de los más variados autores, entre ellos de su propia madre. Entre las canciones más importantes de su repertorio se encuentran: Canción de los Andes, Solo por tu Amor, Morena la Ingratitud, Amor y Más Amor, Amor Dolor, Ódiame, Avecilla, Amor Profundo, Por ti Llorando, Parece Mentira, Ecuador en mi Corazón, Callecita de amor, entre muchas otras. |
A lo Grande con la Grande
Cuando cumplió 40 años de actividad artística, Paulina Tamayo recibió un homenaje por artistas nacionales durante una presentación en el Ágora de la Casa de la Cultura Ecuatoriana de Quito. En otra ocasión, dio un concierto en el Coliseo General Rumiñahui, el centro de espectáculos más grande del país, siendo la primera cantante mujer en agotar todas las localidades. Durante este concierto, Paulina grabó un DVD denominado "A lo Grande con la Grande en Vivo" que salió a la venta con el diario más importante de Ecuador, agotando todos sus ejemplares a pocas horas de su publicación.
Cuando cumplió 40 años de actividad artística, Paulina Tamayo recibió un homenaje por artistas nacionales durante una presentación en el Ágora de la Casa de la Cultura Ecuatoriana de Quito. En otra ocasión, dio un concierto en el Coliseo General Rumiñahui, el centro de espectáculos más grande del país, siendo la primera cantante mujer en agotar todas las localidades. Durante este concierto, Paulina grabó un DVD denominado "A lo Grande con la Grande en Vivo" que salió a la venta con el diario más importante de Ecuador, agotando todos sus ejemplares a pocas horas de su publicación.
Poesía musical al más alto nivel profesional
A lo largo de sus casi 50 años de actividad artística profesional, Paulina Tamayo continua a llenar auditorios brindando espectáculos sinfónicos insuperables, poniendo el mismo sentimiento en cada canción para su público y dejando lo mejor de ella en los escenarios como desde el primer día de su carrera.
A lo largo de sus casi 50 años de actividad artística profesional, Paulina Tamayo continua a llenar auditorios brindando espectáculos sinfónicos insuperables, poniendo el mismo sentimiento en cada canción para su público y dejando lo mejor de ella en los escenarios como desde el primer día de su carrera.
La canción Ódiame
Orígenes de la canción Ódiame
La letra de la canción Ódiame se basa en el soneto “Último Ruego” escrito por el peruano Federico Barreto en 1903 y por una estrofa del poema A*** escrito por el colombiano Guillermo Valencia. Con algunas modificaciones, las piezas literarias fueron fusionadas en una sola para ser musicalizada por el peruano Rafael Otero López junto a los Trovadores. Como resultado se obtuvo el popular vals peruano y que más tarde Julio Jaramillo se encargaría de impulsarlo aún más a nivel mundial. Ódiame ha sido cantada por infinidad de artistas con diferentes estilos, ritmos y hasta la han traducido en otros idiomas. Entre otros grandes intérpretes, además de la extraordinaria Paulina Tamayo, tenemos a José Feliciano, los Tres Reyes, los Embajadores Criollos (Los Ídolos del Pueblo), entre muchos otros. Recientemente la argentina Soledad Pastorutti también grabó este tema haciendo una magistral interpretación.
La letra de la canción Ódiame se basa en el soneto “Último Ruego” escrito por el peruano Federico Barreto en 1903 y por una estrofa del poema A*** escrito por el colombiano Guillermo Valencia. Con algunas modificaciones, las piezas literarias fueron fusionadas en una sola para ser musicalizada por el peruano Rafael Otero López junto a los Trovadores. Como resultado se obtuvo el popular vals peruano y que más tarde Julio Jaramillo se encargaría de impulsarlo aún más a nivel mundial. Ódiame ha sido cantada por infinidad de artistas con diferentes estilos, ritmos y hasta la han traducido en otros idiomas. Entre otros grandes intérpretes, además de la extraordinaria Paulina Tamayo, tenemos a José Feliciano, los Tres Reyes, los Embajadores Criollos (Los Ídolos del Pueblo), entre muchos otros. Recientemente la argentina Soledad Pastorutti también grabó este tema haciendo una magistral interpretación.
Controversia en la autoría de Ódiame
Algunos investigadores sostienen que la canción Ódiame tiene sus orígenes en Ecuador, pues se encontró que previamente a la canción del Sr. Otero se habían grabado dos versiones diferentes con el título: “El Odio” que utilizaban casi la misma letra y la música era prácticamente la misma. A parte del nombre y otras pequeñas diferencias, el ritmo cambiaba de pasillo a vals. La primera versión de El Odio fue cantada por el ecuatoriano Sebastián Rosado y la segunda por el dúo también ecuatoriano Rodolfo Martínez y Alfonso Dougard. Ambas canciones fueron grabadas en las primeras décadas del siglo XX, antes del nacimiento de Rafael Otero, y ya sea en la versión de Sebastián Rosado que en la del dúo Martínez-Duogard fueron utilizadas las dos primeras estrofas del poema de Federico Barreto y la primera estrofa de un poema del colombiano Guillermo Valencia Castillo. Las dos canciones de El Odio tienen otras dos estrofas de las que no se ha identificado el autor y que no fueron utilizadas en la arreglo de Ódiame. Muy probablemente los textos de esas canciones fueron tomados como base para la versión del vals Ódiame.
Algunos investigadores sostienen que la canción Ódiame tiene sus orígenes en Ecuador, pues se encontró que previamente a la canción del Sr. Otero se habían grabado dos versiones diferentes con el título: “El Odio” que utilizaban casi la misma letra y la música era prácticamente la misma. A parte del nombre y otras pequeñas diferencias, el ritmo cambiaba de pasillo a vals. La primera versión de El Odio fue cantada por el ecuatoriano Sebastián Rosado y la segunda por el dúo también ecuatoriano Rodolfo Martínez y Alfonso Dougard. Ambas canciones fueron grabadas en las primeras décadas del siglo XX, antes del nacimiento de Rafael Otero, y ya sea en la versión de Sebastián Rosado que en la del dúo Martínez-Duogard fueron utilizadas las dos primeras estrofas del poema de Federico Barreto y la primera estrofa de un poema del colombiano Guillermo Valencia Castillo. Las dos canciones de El Odio tienen otras dos estrofas de las que no se ha identificado el autor y que no fueron utilizadas en la arreglo de Ódiame. Muy probablemente los textos de esas canciones fueron tomados como base para la versión del vals Ódiame.
Federico Barreto
Federico Barreto Bustíos (1862 - 1929) fue un periodista y poeta peruano. Se ganó el apelativo de "El Cantor del Cautiverio" por su intensa actividad periodística, abogando por la peruanidad de los territorios ocupados por Chile, entre ellos Tacna, su ciudad natal, después de la Guerra del Pacífico. Federico Barreto murió en Francia, en 1929, el mismo año en que Tacna regresó a ser territorio peruano.
Este es el soneto original de Federico Barreto publicado en Tacna, Perú, en 1903. Fueron incluidos en las canciones de El Odio y Ódiame solamente los cuartetos. Nótese que en la publicación original, la letra "y" fue sustituida por la "i" latina en la palabra "estoy" del segundo cuarteto y en la conjunción "y" del primer terceto.
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Último ruego
Odiame, por piedad, yo te lo pido....
¡Odiame sin medida ni clemencia! Odio quiero yo más que indiferencia. El rencor hiere menos que el olvido. Yo quedaré, si me odias, convencido de que me amaste ayer con insistencia, pues estoi cierto de que en la existencia tan sólo se odia lo que se ha querido. En pago de esta saña desmedida, te daré el alma i esta misma vida que tu desdén, a pausas, me arrebata… ¡Te daré todo lo que tú apetezcas! ¿Qué más quieres de mí? Ya ves, ingrata, ¡Te ofrezco el alma porque me aborrezcas! |
Guillermo Valencia
Fue candidato en dos ocasiones a la presidencia de la República de Colombia perdiendo las dos veces.
En su libro de versos "Ritos", publicado por primera vez en 1898, incluyó el poema del cual una estrofa sirvió de inspiración para una parte de las canciones: El Odio y Ódiame. El poema se llama "A***". Los asteriscos sugieren que Valencia quiso mantener una incógnita, probablemente el nombre de una mujer o simplemente para indicar que el significado de la palabra Amor estaba desvaneciendo… Aquí están unos fragmentos del poema. La primera estrofa presentada aquí fue utilizada en las canciones con ligeros cambios:
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A***
¿Qué vales más que yo? ¡Tonta, orgullosa!
Vales lo que tu carne blanca y dura. Los dos, al fin, entre una humilde fosa vestiremos la misma vestidura. Y cuando yo descanse en el osario, fatigado del mundo y del perverso, papeles revolviendo un anticuario, quizá encuentre mi nombre al pie de un verso. Mientras tú, que en la lid de la existencia palma de vencedor has obtenido después de un "de" que indica pertenencia llevarás a lo sumo otro apellido. |
Rafael Otero
EL Maestro Otero fue autor de temas muy famosos entre los que destacan: Los Algarrobos, Ódiame, La Vidalita, Ven Amor, Rosa Victoria, Albedrío, Mis Lágrimas, entre muchas otras más. Murió a la edad de 76 años, dejando un vacío difícil de llenar en todo el mundo.
Esta es la letra de la canción Ódiame, en la versión grabada por Los Trovadores del Norte, del cual el Maestro Rafael Otero formaba parte:
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Ódiame
Ódiame, por piedad, yo te lo pido;
ódiame sin medida, ni clemencia, odio quiero más que indiferencia porque el rencor hiere menos que el olvido. Si tú me odias quedaré yo convencido de que me amaste, mujer, con insistencia; pero ten presente, de acuerdo a la experiencia, que tan sólo se odia lo querido. ¿Qué vale más yo humilde, tú orgullosa? ¿O vale más tu débil hermosura? Piensa bien que en el fondo de la fosa llevaremos la misma vestidura. |
Escuchemos algunas versiones de El Odio y Ódiame
Aquí tenemos las dos versiones de El Odio en las voces de Sebastián Rosado y del dúo Martínez-Duogard (grabados a principios de siglo XX). Desgraciadamente las grabaciones no tienen una óptima calidad pues son muy antiguas. Imagínense, fueron grabadas hace más de 100 años con la tecnología que existía en aquella época. Sin embargo, se pueden entender en su mayor parte.
EL ODIO
Ódiame por piedad yo te lo pido Ódiame sin medida ni clemencia Odio quiero más que indiferencia que el rencor hiere menos que el olvido. Yo quedaré si me odias convencido De que me amaste ayer con insistencia Porque es muy cierto de que en la existencia Tan solo se odia lo que se ha querido. (bis) ¿Qué vales más que yo niña orgullosa? Vales lo que tu carne blanca y pura Pero al fin, en el seno de la fosa, Llevaremos la misma vestidura. (bis) De amores y odios [no entendible] solo te pido Mi espantosa vida y compañera Fue una pobre mujer, una cualquiera Y a mi vida y amor partió conmigo. Ahora que tengo mi triunfo asegurado Me aconsejan que te bote de mi lado Y una mujer así deshonra y calla pero el triunfo no autoriza entre canallas. (bis) |
EL ODIO
Ódiame por piedad yo te lo pido Ódiame sin medida ni clemencia Odio quiero más que indiferencia Pues que el odio hiere menos que el olvido. Yo quedaré si me odias convencido De que me amaste ayer con insistencia Porque es cierto de que en la existencia Tan solo se odia lo que se ha querido. ¿Qué vales tú más que yo hembra orgullosa? Vales lo que tu carne blanca y pura Pues al cabo, en el seno de la fosa, Llevaremos la misma vestidura. Yo que rompí la lid de la victoria Premio de vencedores obtenido Después de un “de” que indica pertenencia A lo sumo llevarás otro apellido. |
Las siguientes canciones son interpretadas por los Tres Reyes y Los Embajadores Criollos. Sin duda, el requinto es un valor agregado en los arreglos musicales.
Las versiones de Julio Jaramillo y José Feliciano, dos de los grandes promotores de la canción Ódiame para popularizarla a nivel mundial. Para estos dos astros de la música internacional se debería abrir un artículo aparte para cada uno de ellos...
Aquí les dejo las magníficas interpretaciones de Soledad Pastorutti y Paulina Tamayo cantando Ódiame... simplemente geniales... En ambas grabaciones predominan fenomenales arreglos orquestales que enaltecen aún más la belleza de las voces y el texto de la canción. La letra de las dos interpretaciones es casi la misma, Soledad pluraliza algunas palabras y canta más con el género femenino.
ÓDIAME
Ódiame, por piedad, yo te lo pido;
ódiame sin medida, ni clemencia,
odio quiero más que indiferencia
porque el rencor hiere menos que el olvido.
Si tú me odias quedaré yo convencido
de que me amaste, mi amor, con insistencia;
pero ten presente y de acuerdo a la experiencia,
que tan sólo se odia lo querido.
¿Qué vale más yo humilde, tú orgullosa?
¿O vale más tu débil hermosura?
Piensa bien que en el fondo de la fosa
llevaremos la misma vestidura.
Ódiame, por piedad, yo te lo pido;
ódiame sin medida, ni clemencia,
odio quiero más que indiferencia
porque el rencor hiere menos que el olvido.
Si tú me odias quedaré yo convencido
de que me amaste, mi amor, con insistencia;
pero ten presente y de acuerdo a la experiencia,
que tan sólo se odia lo querido.
¿Qué vale más yo humilde, tú orgullosa?
¿O vale más tu débil hermosura?
Piensa bien que en el fondo de la fosa
llevaremos la misma vestidura.
Disputa de la autoría de Ódiame entre Perú y Ecuador
Mientras navegaba por la red en busca de saber más sobre la canción Ódiame, me di cuenta que había algunos debates en los cuales se discutía si el verdadero origen de este tema era peruano o quizá se le debería asignar a Ecuador. Esto se debe a la impugnación iniciada en las redes sociales al Sr. Rafael Otero en calidad de autor de esa obra artística. Sabemos que toda creación tiene diferentes fuentes de inspiración y que los autores reciben influencia de alguna manera de otros artistas para concretar sus obras. Son pocas las combinaciones de inspiraciones que logran grandes resultados como lo ha hecho Ódiame. Después de todo, si no hubiera sido por el Maestro Rafael Otero, probablemente esa riqueza poética hoy estaría perdida. Aquí, en este espacio no queremos abrir un fórum para discutir a qué país corresponde esta canción, pues ya no incumbe sólo a Perú y Ecuador, sino que el tema pertenece a todo el mundo. En su lugar, queremos dar reconocimiento a cada uno de los participantes en su elaboración y subsecuente evolución, incluyendo a todos los intérpretes con los rasgos distintivos que cada uno de ellos ha dejado como aportación: desde la primera palabra del texto hasta la última nota musical introducida en los arreglos... Todos ellos han contribuido a obtener como resultado una verdadera ¡OBRA MAESTRA! Más allá de saber quién musicalizó primero, lo que aquí queremos es rendir homenaje a todos ellos por la realización de esta joya musical, digna de mostrar al mundo como obra latinoamericana. Y particularmente agradecer a Perú y a Ecuador por habernos regalado esta genial combinación artística… y también a Colombia, ¿Por qué no? La contribución de Guillermo Valencia también cuenta con su granito de arena para la construcción de este grandioso poema musical.
Mientras navegaba por la red en busca de saber más sobre la canción Ódiame, me di cuenta que había algunos debates en los cuales se discutía si el verdadero origen de este tema era peruano o quizá se le debería asignar a Ecuador. Esto se debe a la impugnación iniciada en las redes sociales al Sr. Rafael Otero en calidad de autor de esa obra artística. Sabemos que toda creación tiene diferentes fuentes de inspiración y que los autores reciben influencia de alguna manera de otros artistas para concretar sus obras. Son pocas las combinaciones de inspiraciones que logran grandes resultados como lo ha hecho Ódiame. Después de todo, si no hubiera sido por el Maestro Rafael Otero, probablemente esa riqueza poética hoy estaría perdida. Aquí, en este espacio no queremos abrir un fórum para discutir a qué país corresponde esta canción, pues ya no incumbe sólo a Perú y Ecuador, sino que el tema pertenece a todo el mundo. En su lugar, queremos dar reconocimiento a cada uno de los participantes en su elaboración y subsecuente evolución, incluyendo a todos los intérpretes con los rasgos distintivos que cada uno de ellos ha dejado como aportación: desde la primera palabra del texto hasta la última nota musical introducida en los arreglos... Todos ellos han contribuido a obtener como resultado una verdadera ¡OBRA MAESTRA! Más allá de saber quién musicalizó primero, lo que aquí queremos es rendir homenaje a todos ellos por la realización de esta joya musical, digna de mostrar al mundo como obra latinoamericana. Y particularmente agradecer a Perú y a Ecuador por habernos regalado esta genial combinación artística… y también a Colombia, ¿Por qué no? La contribución de Guillermo Valencia también cuenta con su granito de arena para la construcción de este grandioso poema musical.
La del estribo
Yo creo que todos, al menos una vez, hemos perdido un amor importante en nuestras vidas y la canción Ódiame nos ha ayudado a aliviar esa herida sentimental... mientras escuchamos este poema musical, entre tristeza y desesperación, lanzamos a nuestro amor perdido un: ÚLTIMO RUEGO…
Yo creo que todos, al menos una vez, hemos perdido un amor importante en nuestras vidas y la canción Ódiame nos ha ayudado a aliviar esa herida sentimental... mientras escuchamos este poema musical, entre tristeza y desesperación, lanzamos a nuestro amor perdido un: ÚLTIMO RUEGO…